Con una misa realizada en la noche de este domingo en la iglesia del barrio Santa María del Lago (localidad de Engativá), familiares, amigos y ciudadanos indignados por el asesinato de Diego Felipe Becerra Lizarazo, lo recordaron, tras siete años de su muerte.
El joven, de 16 años, además de ser estudiante, era grafitero, y falleció como consecuencia del disparo que le propinó el hoy destituido patrullero de la Policía Wilmer Antonio Alarcón Vargas, la noche del 19 de agosto del 2011, en el puente de la calle 116 con avenida Boyacá.
Pese a que en el momento de los hechos algunos uniformados quisieron manchar el nombre de Becerra Lizarazo, haciéndolo pasar por un supuesto atracador, hoy las investigaciones adelantadas por la justicia demuestran que el menor estaba pintando un grafiti, y que fue atacado cuando estaba indefenso, al tratar de huir del lugar. Ese día solo tenía sus latas de pintura.
Esto se constató con los exámenes realizados por el Instituto Nacional de Medicina Legal, que determinó que el cuerpo de Diego Felipe no tenía presencia de antimonio, plomo o bario. O sea, que no portaba ningún arma ni de fuego ni blanca.
Por este hecho, el patrullero Wilmer Alarcón Vargas fue condenado a principios del 2017 a 37 años y seis meses de prisión por el Juzgado 33 Penal de Conocimiento de Bogotá. Pero desde el 2016 se encuentra prófugo de la justicia.
Gustavo Trejos, padrastro de Diego Felipe, y que junto a la mamá del joven, Liliana Lizarazo, han emprendido varias acciones para que se haga justicia, explicó que después de cinco años de batallas jurídicas que comenzaron en 2013, solo se han logrado cuatro condenas, incluyendo la del destituido patrullero Wilmer Antonio Alarcón.
Las tres restantes fueron contra los patrulleros –también destituidos por la Procuraduría General– Freddy Navarrete (a 48 meses) y Nelsón Rodríguez (a 60 meses). La última fue contra el subintendente Nelson Giovanny Tovar, a quien se le acusó de poner el arma en el cuerpo del joven grafitero.
Ellos tres hicieron un acuerdo con la Fiscalía General para colaborar con la justicia. Sin embargo, la investigación del caso ha estado marcada por varios atentados, principalmente, contra Nelson Giovanny Tovar, quien se convirtió en testigo clave, recordó Gustavo Trejos.